Uruguay entra al nuevo año con una perspectiva de cambios. No sólo se trata de la asunción de un nuevo gobierno, dirigido por una fuerza política diferente de los partidos tradicionales que gobernaron históricamente nuestro país, sino también de una perspectiva que auspicia dejar atrás lo peor de la crisis económica y social que llegó a su paroxismo durante el 2002 y el 2003.
El signo del cambio político puede todavía revestir incógnitas, pero la apertura a la participación social, a la descentralización del poder, a la discusión colectiva de las políticas públicas son algo auspicioso y motivador. El cambio, para que sea real, debe ser asumido y desarrollado por los agentes sociales y culturales. Que ello sea posible, a partir de este año, es tal vez lo que más entusiasmo aporta a quienes apuestan por una transformación progresista del país. En este punto, para el Centro Cultural Dodecá, el cambio se combina perfectamente con una línea de continuidad y compromiso. Seguiremos desarrollando polémicas, debates, instancias de intercambio de visiones sociales, culturales y políticas tal como lo hemos venido haciendo a partir de la difusión del cine y el arte de calidad, de su apreciación crítica y colectiva, con un ánimo formativo y, para el presente, impulsando una línea de pensamiento utópico sobre el país que queremos, la sociedad en la que nos gustaría vivir, el mundo en el que aspiramos habitar.
Para quienes trabajamos en el ámbito cultural, además, en el 2005 se abren desafíos importantes, la discusión en el ámbito de la sociedad civil del anteproyecto redactado por UNESCO para una Convención sobre la Protección de la Diversidad de los Contenidos Culturales y las Expresiones Artísticas, así como las discusiones que se vienen realizando en vistas a la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información. Estos dos desafíos nos obligan a reflexionar y comprometernos con tareas impostergables en lo relacionado con Derechos Humanos fundamentales, como lo es el del acceso a la cultura, la información y el conocimiento. En ese marco se inscribe el trabajo formativo y educativo de la Escuela de Cine Dodecá para Jóvenes y las actividades del Centro Cultural Dodecá.