Se inaugura «Pliegues y repliegues de una cuarentena»de Paula Giménez con la curaduría de Florencia Flanagan

Posted on Nov 08, 2022

Este jueves 17 de Noviembre se inaugura la exposición «Pliegues y repliegues de una cuarentena» de la artista Paula Giménez con la curaduría de Florencia Flanagan en el Centro Cultural Dodecá. La exposición es la sexta del año y se hace en el marco de los veinte años del centro.

El contexto social en que emerge esta obra participativa activada por Paula
Giménez es el inicio de la pandemia por Covid 19 en marzo del 2020, en un
momento de total incertidumbre y desconcierto mundial. Desde el pico más
álgido del confinamiento y distanciamiento social la Intendencia de Montevideo,
ante el cierre de los espacios dedicados a la cultura, realiza una convocatoria
para apoyar el trabajo artístico e impulsar encuentros entre las personas. 

Genealogía Claire Bishop 1 sitúa los comienzos de las prácticas de arte
participativo 2 con las prácticas de los Dadaístas en 1921, continuando en los
años sesenta y haciendo explosión en los noventas. Estas emergen en
situaciones de crisis y rupturas del tejido social cuestionando la cultura
hegemónica de masas, los canales elitistas del arte para crear sentido y
generar conocimiento. Se imbrican con prácticas sociales y políticas. Hacen
énfasis en los procesos, vínculos y acontecimientos en los que se encuentran
el arte y la vida, más que en los resultados objetuales funcionales al mercado.
Buscan transformar la relación entre el artista y el espectador, incluyendo a
éste en distintos dispositivos de participación activa cuestionando el poder de
la autoría y genio artístico. Apostando al poder transformador del arte y la
cultura en momentos en que la vida se pone difícil, Pliegues y repliegues de
una cuarentena es parte de este linaje.

El contexto personal Desde el seguro de paro y la incertidumbre sobre el
trabajo, surge en Paula Giménez la necesidad de aprovechar el tiempo que la
pandemia ofrecía, para la expansión de la experiencia artística. La cocina de
su casa se convirtió en espacio de creación e intercambio de ideas junto a su
familia. Dedicando cada rato libre a alimentar la creatividad y el juego como
modo de resistir al miedo que llegaba a través de los medios, crea esta serie
de objetos_libros viajeros que invitaban a recuperar nuestros vínculos
mediante el juego. Con textura de papel hecho a mano en sus tapas y
envueltos en bolsas de tela bordada recordaban el sentido del tacto en una
escena en la que tocar podía implicar enfermar, y rociábamos todo lo que
llegaba del exterior con alcohol en gel.

Juego exquisito Formada como tallerista en el linaje del Taller Malvín 3 Paula
tiene recursos desde su rol para propiciar que el otro pueda expresarse sin
interferir en su campo de creación. Desde allí cuidó amorosamente cada
detalle de las reglas del juego para que este dispositivo pudiera funcionar a
distancia. Encontrando el equilibrio entre pautar, explicar, dar seguimiento y

dar libertades, habilitar tiempos, espacios y estancamientos, pudo confiar en la
inteligencia colectiva y en el devenir de los acontecimientos.
Como artista se impulsa desde la experiencia del arte, y propone que las
intervenciones se realicen mediante la técnica del cadáver exquisito 4 creada por
los surrealistas, y reinventada por artistas de otros tiempos. Generando una
narrativa colectiva y afectiva de esta vivencia pandémica que ha tenido
profundas efectuaciones en nuestros modos de vida, nuestra salud física, y
también en la mental y emocional Con cambios radicales en nuestro vínculo
con la tecnología, el trabajo, el ocio y la economía, que aún no hemos podido
cuantificar ni asimilar. En este horno caliente o freezer gélido en que hemos
transformado el mundo, recibir y hacer circular uno de estos libros, ha sido una
bocanada de aire límpido que nos recuerda que respirar era un milagro.

Abrir la casa: ex_poner_se
En marzo del 2022 llega la invitación a exponer desde otro contexto que
habilita a salir de la cocina, abrir las puertas de la casa, de cada hoja de cada
libro. Como la ola que sube y baja la artista deseaba el momento de juntar
libros y personas para abrirlos y desplegar juntxs lo plegado y replegado. En
uno de esos actos que devienen después de la tormenta comprobamos que
estamos vivos y el arte nos sigue convocando.

Florencia Flanagan
Curadora
El pinar, noviembre 2022