La muestra Ulises Beisso se inaugura el lunes 1 de diciembre a las 20hs. en la Sala de Exposiciones Dodecá. A propósito del artista y de su obra Fermín Hontou (Ombú) escribe:
«Ulises era un punto de referencia, pero sobre todo era un desafío permanente; en una obra de teatro, en una película, en una novela, siempre había encontrado algo que los demás no habíamos percibido, siemnpre había mirado algo que los demás no habíamos visto. Ulises siempre había sentido algo nuevo, de una manera tan radical, que supo contarme la novedad, el descubrimiento, de una experiencia tan vieja, como la tibieza del sol en la piel… Su vida, que fue un profundo acto estético, fue por eso mismo, un profundo acto estético…»
Estas palabras fueron escritas y publicadas en octubre de 1996 por Carlos Vargas en Cuadernos de Marcha, unos días después de la muerte física de Ulises Beisso, un 26 de setiembre.
Hoy, en el 2003, mi amigo Carlos Vargas, primo de Ulises, tampoco está entre nosotros, quizás porque, como también escribió esa vez: «…a la muerte le gusta llevarse a los mejores cuando aún son jóvenes».
Esta exposición quiere ser sólo un rescate mínimo a cuento de futuras muestras que den la dimensión real de un gran artista, cuya obra fue y sigue siendo música de belleza y vida, única e indefinible.
Ulises Beisso fue mi amigo, mi compañero de estudios de arte, y también mi pariente. Además fue mi maestro y un artista de esos que uno envidia sin maldad pero con admiración. La vida de Ulises fue una obra de arte, donde su búsqueda de belleza, aún en el sufrimiento, nos conmina (para usar una palabra muy suya ) a disfrutar con felicidad eterna la tibieza del sol en la piel.»